Tras desbaratar un complot dela Sectadela Llama Fríay librarse del acoso del temible Papa Midnite, John Constantine prosigue con sus juegos de muerte y engaño. Para empezar, embauca a Shazam con objeto de encerrar su poder en una botella. Pero las maquinaciones de un maestro de la mentira también pueden estropearse. La irrupción de un demonio al servicio dela Llama Fríadeja al cínico inglés desangrándose en el suelo del bar de Lloyd. Indefenso, al borde de la muerte, sus enemigos se abaten sobre él para rematarlo y hacerse con los despojos.